Entreversados.

Que últimamente ya nada es lo mismo, los abrazos suelen quedarse vacíos y los besos fríos . Las sonrisas tontas que se nos escapaban cuando nos mirábamos son un poco fingidas si nos ponemos a comparar con el pasado. Nos rompimos una vez y desde entonces todo es un tira y afloja, un ahora te quiero como nunca y ahora como siempre. Lo bueno es que pase lo que pase y aunque las cosas ahora sean un poco distintas, no podemos dejar de querernos. Muchas veces echo de menos ser aquellos mejores amigos que éramos al principio de toda esta historia, pero pensándolo bien, nos diríamos que lo mejor sería dejarlo y tomar caminos diferentes.  Nos hemos aferrado tanto a nosotros mismos que ahora ya no sabemos ser el uno sin el otro y aunque eso es bueno, me aterra. Me da miedo depender tanto de alguien, me da miedo ser solo si tu eres. Y sobre todo tengo miedo a que todo esto se acabe después de todo  lo que hemos sido capaces de superar. Que decir te quiero se queda pequeño... que es verdad que

Cuando somos pequeños, consideramos la navidad como una época feliz ya que recibimos regalos y toda la familia se une, creemos que todo puede suceder en estas fechas porque la gente que nos ha vendido la moto y de repente, todos tenemos que ser buenos, pero bien, la gente que es buena, lo es durante todo el año y normalmente, no necesita nada a cambio. Desde el año pasado, para mí estas fechas ya no son lo mismo. Ya falta alguien, ya hay ausencias, ya no se respira felicidad. Últimamente me he dado cuenta de que tenemos que empezar a valorar lo que tenemos porque todo se acaba esfumando. Somos como una pompa de jabón que cuanto más arriba está, más riesgo de explotar tiene. Hay amores, amistades, relaciones, que parece que van a ser para toda la vida, que te sacan esa pequeña y tímida sonrisa que nada más puede sacarte, pero ahora sé que siempre hay algo mejor, que aunque no queramos verlo o nos de miedo enfrentarnos a la realidad, cuando algo se acaba es porque quizá, la vid

te quiero mucho, mejor amigo. sé que lo nuestro últimamente es un tira y afloja, un ahora somos mejores amigos  y al rato ni nos ocnocemos, sé que nos hemos pegado catorce años juntos y hemos podido con todo, así que esta vez no va a ser diferente. Te lo prometo. Te quiero mucho, ¿vale? sé que no soy la mejor amiga, ni la más simpática, que soy muy borde cuando no te lo mereces, que no sé sacarte las miles de sonrisas que te mereces. Sé que nuestras historia va a dejar marca, porque aunque nuestras rachas malas sean muy malas, las buenas están dejando muy buenos recuerdos. Quería agradecerte una vez más los buenos ratos a tu lado, esas noches en pradiel, esas tardes en el cuarto, esas fotos haciendo el gilipollas, poque nos da igual lo que piensen de nosotros, esos, te quiero "foyar" que y griega, esos, quiero empezar el año a tu lado. Este año no ha sido fácil para ninguno de los dos, pero yo te prometo estar ahí, como antes, siempre. Que aunque me cueste demostrar las

Muchas veces me pongo a recordar cómo y cuándo comenzó todo. No sé, no creo que fuera de la forma correcta, ni de la mejor manera posible, esa noche posiblemente fue una de las peores noches de mi vida, pero dos años después, la considero una de las mejores, porque me unió a ti.  ¿Te acuerdas de la carrera que me tuve que echar?   ¿De las hostias que me iba dando con los coches? Sí,  no tuve que darte una buena imagen esa noche, pero ¿Sabes otra cosa? no me arrepiento de nada. Poco a poco nos fuimos haciendo mejores amigas, nuestras cartas, nuestros abrazos, nuestras idas y venidas,  mis vete a la mierda, tus pues vale, mis lo siento, tus no pasa nada, mis cambios de humor, tus ganas de mandarme a mí a la mierda, nuestras peleas diarias, nuestras sonrisas por las mañanas. No sé. La primera etapa de nuestra historia no fue muy bonita que digamos, pero nos hizo fuertes y aunque tardamos seis meses en darnos cuenta de que nos necesitábamos, de que no sabíamos estar la una sin la otra, m