Estás aquí, mi amor
y eso me causa un gran dolor.
Siquiera le diste a la pausa
para que pudiera guardarte rencor.
En otros tiempos,
que estuvieras más cerca
era de todo, menos un destiempo.
Era un latido extra.
Pero hay casi puedo olerte
y ya no puedo ni verte.
Sufro al pensar en abrazarte
y muero sin poder besarte.
Mírame una última vez.
mírame, con tu blanca tez.
Mírame y dime qué es lo que ves.
Mira y luego... vete otra vez.
Comentarios
Publicar un comentario